Un Por Ahora que se multiplico en Millones para convertirse en un Para Siempre
El Gobierno y el pueblo venezolano conmemoran este domingo la rebelión cívico-militar del 4 de febrero de 1992, liderada por el líder de la Revolución Bolivariana Hugo Chávez.
Febrero rebelde, insurgente y revolucionario, en febrero de este año se cumplen los 19 años de la Revolución, en donde el Comandante Presidente Hugo Rafael Chávez toma posesión por primera vez un 02 de enero, y hoy recordamos y conmemoramos los 26 años del 4 de febrero.
Era martes. La semana laboral apenas había comenzado. A las 12:00 de la medianoche casi todo el país dormía, a excepción de 5 tenientes coroneles, 14 mayores, 54 capitanes, 67 subtenientes, 65 suboficiales, 101 sargentos de tropa y 2.056 soldados alistados. Era el 4 de febrero de 1992. Hoy se cumplen 26 años del día que Venezuela amaneció de “golpe”.
El grupo de militares despiertos formaba parte de una organización conocida como Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 (MBR-200), con una ideología política revolucionaria, mezclada con el pensamiento de Simón Bolívar.
Los rebeldes pertenecían a 10 batallones, formaban parte de las guarniciones militares de los estados Aragua, Carabobo, Miranda, Zulia y el Distrito Federal, y fueron dirigidos por los, entonces jóvenes, oficiales Hugo Chávez Frías, Francisco Arias Cárdenas, Yoel Acosta Chirinos, Jesús Urdaneta y Miguel Ortiz Contreras.
Carlos Andrés Pérez, presidente de Venezuela, regresaba de participar en el Foro Económico Mundial de Davos, Suiza. Los rumores de la subordinación no tardaron en llegar. El mandatario logró llegar a la estación estadal de televisión Venevisión, desde donde se dirigió al país en dos ocasiones para informar sobre la situación.
Los militares alzados asaltaron la residencia presidencial (La Casona) y otras importantes ciudades del país. Los enfrentamientos fueron intensos en algunos casos y la cifra oficial de muertos fue de 32 personas.
Fracasado el intento de toma de la ciudad capital, Caracas, los insurgentes se rindieron luego que las guarniciones del interior del país fueran recuperadas por las fuerzas del gobierno constitucional.
Hugo Chávez fue arrestado y privado de libertad por fuerzas de seguridad, pero poco antes se le dio la oportunidad de dirigirse al país en una alocución transmitida ante los medios de comunicación, en donde asumía la responsabilidad del alzamiento y ordenaba a los insurgentes que aun luchaban a que se rindieran para evitar mayores derramamientos de sangre: “Por ahora, los objetivos que nos planteamos no fueron logrados”.
Con la imagen pública de Pérez desacreditada por las reformas económicas emprendidas, el descrédito impulsado por visiones izquierdistas y un estallido social conocido como “El Caracazo”, el ambiente se hizo idóneo para que otros políticos también desafiaran la autoridad del mandatario.
Carlos Andrés Pérez decretó la suspensión de las garantías constitucionales y en una reunió realizada el día siguiente, el político Rafael Caldera criticó la situación del país y desestimó la interpretación de magnicidio que defendía Pérez. Con este discurso, Caldera aumentó una popularidad que lo llevó a ser candidato presidencial para el próximo período.
Los militares involucrados en el golpe del 4 de febrero fueron juzgados y hallados culpables de rebelión. Algunos fueron sobreseídos, otros dados de baja y el resto encarcelados, entre ellos Hugo Chávez.
La liberación de presos políticos fue una de las principales promesas de Caldera en sus campaña de cara a las elecciones. Ganó y cumplió. El líder del MBR-200, Hugo Chávez salió en libertad y posteriormente se convirtió en el presidente de Venezuela desde 1999 hasta su fallecimiento en 2013.
Han pasado 26 años desde ese 4 de febrero, el día en que Venezuela amaneció de golpe y el recuerdo de Hugo Chávez en el país ya no parece decir “por ahora”, sino “para siempre”.
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